Redactar un supuesto práctico en un tiempo limitado y con los nervios a flor de piel no es algo sencillo. Pero como ya sabéis, todo es entrenamiento, esfuerzo y actitud. Con la mezcla de estos tres ingredientes, todo es posible.
Sabemos que esta parte de la prueba suele preocuparos más debido a su complejidad, ya que el alumno debe desarrollar y resolver el supuesto en base a sus conocimientos. Pero presta atención a los siguientes consejos y esta parte práctica te va a resultar muchísimo más sencilla.
¿Qué son los supuestos prácticos en las oposiciones?
Como ya sabes, se trata de ejercicios en los que se plantea una situación real que puede darse en un centro educativo y que expone un problema con el objetivo de que el alumno desarrolle y exponga una posible solución.
Este es un ejemplo de caso práctico a resolver en la primera fase del proceso selectivo:
Desarrolla las estrategias que emplearía con un alumno que presenta conductas disruptivas que está integrado en un grupo de 4º de Primaria, en el que hay 25 alumnos. Enmarque las actuaciones en una unidad formativa en la que trabajará juegos con materiales alternativos.
Con este tipo de ejercicio se pretende que el opositor demuestre que tiene los conocimientos y la formación necesaria, así como la capacidad de aplicarlos a una situación real. El caso práctico propuesto estará relacionado con la especialidad por la que el alumno está opositando, de forma que no debes preocuparte, ya que si conoces el temario, vas a saber desenvolverte sin problema.
Consejos para resolver el supuesto práctico en la especialidad de Educación Física
- Hay diferentes tipos de supuestos cuyo planteamiento y por tanto, resolución, suele ser diferente. Por ello te planteamos que desarrolles un modelo o estructura para cada uno de ellos, creando así un esquema de puntos que debes tratar en función del modelo que abarques. Por ejemplo, plantea una introducción, un apartado de desarrollo, una conclusión y las referencias bibliográficas.
- Piensa muy bien en cuánto te vas a extender antes de empezar a escribir, ya que puede darse el caso de que se acabe el tiempo cuando aún no hayas terminado el supuesto. Si practicas en casa, seguramente a sabrás la extensión de cada tipo de supuesto.
- No quites importancia a las introducciones y conclusiones, donde el tribunal debe entender y comprobar cuánto controlas del caso.
- Permítete innovar, ser original y novedoso, pero siempre con un sentido. No dejes de plantear lo que tú consideras una buena solución por no ser la típica respuesta. No olvides que tu propuesta debe ser realista y viable, pero tendrás mucho a tu favor si consigues sorprender al tribunal.
- Lee muy bien el supuesto y comprende detenidamente antes de empezar a escribir. Piensa qué te están exponiendo y qué enfoque vas a darle. Una vez lo tengas claro, sigue con el esquema que tenías planteado para este tipo de caso práctico.
- Intenta escribir de forma atractiva y por supuesto, no cometer ninguna falta ortográfica o de puntuación. Organiza muy bien la información y cuida mucho la estructura de tu contenido.
¿Qué te parecen nuestros consejos? ¿Añadirías alguno? Comparte tu experiencia con el resto de compañeros para retroalimentaros y conseguir vuestro objetivo juntos.
¡Nos leemos en el siguiente post!